Diego de León Barrios asumió la Gobernación Departamental el pasado 21 de marzo. Desde entonces le ha tocado apagar fuegos y representar al presidente Bernardo Arévalo.
Por Isaías Morales
Cuando Bernardo Arévalo anunció que la postulación para ocupar los cargos de gobernador departamental sería pública, Diego de León preparó una propuesta y se lanzó al ruedo. La presentó en febrero al Consejo Departamental de Desarrollo de Guatemala y resultó finalista.
En esta entrevista, De León se refiera a la creación de la Región Metropolitana como el espacio indicado para que las municipalidades busquen soluciones a problemas comunes y recursos en conjunto.
Cuando se postuló como candidato para gobernador promovió la creación la región metropolitana, la cual solo existe en Constitución. ¿Por qué promoverla cuando ya existe el Consejo Regional de Desarrollo y las mancomunidades?
–Porque se requiere de una ley para darle vida y recursos. En el Congreso existen dos iniciativas, habrá que ver qué aprueba el pleno.
¿Y cómo pretende incidir?
–Recuerde que como Gobernador Departamental represento al Presidente y eso significa que debo seguir sus lineamientos e indicaciones, por lo tanto, él me tendría que indicar la manera y qué tanto, ¿verdad? Lo que sí podría ocurrer es que a nivel técnico, al momento de analizar la iniciativa, se solicite algún tipo de dictamen o participación en estas mesas.
También presido el Consejo Departamental de Desarrollo y el Consejo Regional de Desarrollo Metropolitano. Este último aunque tiene el término, no tiene las funciones de una región como tal.
Región metropolitana con al menos 17 municipios
¿Qué municipios del departamento de Guatemala abarcaría la región metropolitana?
–Yo propuse los 17, pero hay personas que consideran que deben sumarse otros que no son del departamento como San Lucas Sacatepéquez. En tanto que otras creen que algunos municipios que sí son del departamento no tienen que ser parte de la región metropolitana por la desconexión urbana existente. Mencionan a San José del Golfo y Chuarrancho que son más rurales.
Pero todo va a depender de cómo esté redactada la ley y de qué manera se apruebe. Sin embargo, por viabilidad política no sería buena idea dejar afuera a ningún municipio del departamento de Guatemala, aunque se sumen Palín (Escuntla) y San Lucas, por ejemplo.
Los alcaldes insisten en la autonomía municipal, ¿de que manera les afectaría la creación de la región metropolitana?
–De nuevo, dependería de cómo esté redactada la ley. Sin embargo, en los países que tienen distrito central como Argentina con Buenos Aires y México con Ciudad de México hay una persona que lidera, no un alcalde. Debe ser ser alguien que responda al gobierno central.
¿Cómo se administrarían los recursos?
–El sentido que tiene la región metropolitana es gestionar los recursos del gobierno central, en coordinación con todos estos municipios miembros. En los últimos años hemos visto que en los municipios afines al gobierno de turno se hace obra, y a los otros no se les da nada, ¿verdad? Todo es político, nada es técnico. La ventaja no solo es que ya está establecida en la Constitución, sino que además facilitaría el trabajo en conjunto.
Es decir, sería un ente donde todos tendrían que participar porque existe el incentivo de que el gobierno central daría los recursos. Las municipalidades seguirían siendo autónomas y funcionando como ahora.
–Sí, así sería. Los alcaldes deben por ley asistir al Consejo de Desarrollo y eso no vulnera su autonomía porque no tendrán que aportar sus recursos ni su administración Lo mismo sería acá.
¿De qué manera se trataría el tema del agua en la región metropolitana?
–No soy técnico en temas hídricos, pero sí he escuchado en algunos conversatorios. Se necesita traer agua de otros lugares, no para un municipio sino para una región. Esto requiere de una discusión profunda que puede darse en el seno de la región metropolitana.
Lo mismo sucede con los desechos sólidos. El vertedero de Amsa, ubicado en Villa Nueva, recibe los de 32 municipios y el de la zona 3, de al menos diez.
Pasemos al tránsito, ¿esta región contemplaría crear alguna autoridad?
–Aquí existe una oportunidad para que administre el transporte público. Hoy cada municipio tiene su sistema y su propia tarjeta porque cada quien quiere manejar sus recursos. Pero sí creo que se podría establecer alguna autoridad o institución que administre el transporte público, aunque las unidades sigan perteneciendo a cada municipio. Que existe un sistema integrado para que los ciudadanos no tengamos necesidad de usar distintas tarjetas.
¿Podría ser una supervisión como lo que ya tiene la Empresa Municipal de Transporte de la ciudad?
–Habría que estudiarlo con el viceministerio de Transportes que también tiene la regulación del transporte público a nivel nacional. Tendría que ser un poco entresacar alguna función del viceministerio y delegarla en la región metropolitana para esa área geográfica. Creo que iría por ahí, tampoco soy técnico en eso.
Las mancomunidades no corren peligro
Y en este caso ¿cómo quedarían las mancomunidades? ¿seguirían funcionando?
–Por supuesto, no solo porque están reguladas en el Código Municipal, sino porque son voluntarias.
Hemos hablado de la region metropolitana, pero las cabeceras departamentales enfrentan situaciones similares. ¿Ha considerado el gobierno central replicar este modelo en otras áreas?
–De momento yo no tengo conocimiento que la región metropolitana en sí misma sea una iniciativa del Ejecutivo, yo la plasmé como la visión estratégica de mi plan de trabajo.
Solo para aclarar una última duda, a diferencia de una comunidad que es voluntaria esta sí sería obligatoria para cada municipio.
–Así es, y no solo para los alcaldes. También deberán asistir ciertos ministros de Estado para viabilizar algunas soluciones.
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